Yo no solo soy de provincia, si no de un pueblito que esta en el centro del Amazonas, Buenos Aires, de modo que los libros por las cuales me siento más identificados, son los que abordan esa temática, y de los cuales he aprendido mucho el lenguaje. Estoy haciendo referencia a Eleodoro Vargas Vicuña, (Ñahuin), Me quedo con La mala hora, Crónicas de una muerte anunciada, El amor en los tiempos del cólera y todos los cuentos de Gabriel García Márquez. Otra novela que me impresionó de Mario fue Pantaleón y las visitadoras, y La casa verde. 

Por el boom llegué a William Faulkner, sobre todo me gustan sus cuentos y La paga de los soldados. Borges fue fundamental en mi formación. Un agradecimiento especial al autor de Una casa para el señor Biswas de V. S. Naipaul. Sin embargo, me quedo con Juan Rulfo, autor que supo atraparme en esa atmósfera pueblerina, triste y desolada en las que viven sus personajes de El Llano en llamas y Pedro Páramo. En el ámbito amazónico, Germán Lequerica y Ése maldito viento

Hay una narrativa en proceso, en busca de un derrotero. Escritores nóveles publican en paralelo con escritores del siglo pasado que empujan el coche de la nueva narrativa, tales como Roger Rumrrill con La virgen del Samiria, 2012; Welmer Cárdenas con Libélulas rumorosas de la noche, 2008, cuentos de temática erótica y El llanto del Ayaymama, 2014 de temática histórica; Percy Vílchez con Inquilino de las sombras, 2002 y Obsesión por Ofelia, 2021.

Hay una interesante obra de Werner Bartra Padilla, que recibió el Premio Nacional de Novela Corta Horacio 2005, El patio de los pasos invisibles (2005), que será el punto de partida de esta nueva camada de escritores. Una novela cuidadosamente trabajada, sobre todo en la forma, con una interesante temática: los problemas de la urbe de Iquitos y la ruralidad. 

Continúa con una novela atrevida y desprejuiciada Hostal amor, 2006, de Cayo Vásquez. Hasta llegar al segundo hito con las novelas de temáticas históricas La casa de las fronteras, 2019, y El país de los errantes, 2022. José Rodríguez Siguas con cuentos urbanos Entre juegos y fugaz; 2014; Patrick Pareja con Tierra de Orates, 2021, cuentos donde los personajes están locos en distintos espacios del Perú. Melisa Mendieta con Obituario 2021, con cuentos sobre la pandemia. Cerrando por ahora este siclo con un escritor de espíritu joven, intrépido y sin censura, Álvaro Ique Ramírez, con Sicario, 2019 y Con un hacha en la mano ,2024.

Hice mi servicio militar voluntario en 2008 en el Grupo Aéreo N°42. Mi estancia ahí duró tres años. Salí con el grado de sargento. Estar ahí es como estar en otro mundo, entre ejercicios, rutinas estrictas y órdenes que se deben cumplir sin dudas ni murmuraciones. Viví anécdotas, adquirí experiencias y afiancé mi patriotismo. Ahora que han pasado mucho tiempo, cada vez que me sueño uniformado, por alguna razón, me siento triste. En realidad, me marcó parte de mi vida.

En uno de mis cuentos (Vida de perros) tomo como escenario la base del grupo aéreo. Pero no quise contar estas experiencias, ya escritores de la talla de Mario Vargas Llosa han hablado sobre el tema. Lo que he intentado transmitir es el estado de anímico, psicológico del personaje, el sufrimiento del mismo desde que deja la vida civil hasta ingresar al cuartel como recluta y ahí comprenderá lo rudo de la vida militar.

Por otro lado, mi padre fue soldado del Ejército, tirador selecto, fue él quien me ha contado sus experiencias. Y quizá el soldado Fernando Lores tenga las características de mi papá en gran medida.

Las historias están unidas entre sí por un hilo conductor llamado tragedia, las sombras. Desde que empecé a escribir he pensado en cuentos que estén interrelacionados entre sí, como una gran novela. Una de ello ejemplo es la novela Miguel Street (1959), de V. S. Naipaul. Cuentos que se relacionen por un personaje que puede aparecer en otros cuentos del mismo libro, o simplemente, el mismo pueblo. En el camino me encontré con que Gabo ya los había hecho. Otra intertextualidad podría ser el anime Death Note, la misma Biblia, entre otros.