María Emilia Cornejo (1949-1972) nació bajo el signo de leo y no llegó sola, sino con una hermana gemela llamada Ana. Ambas vivían en Pueblo Libre y luego, María Emilia (en adelante, MEC), casada, se muda a San Juan de Lurigancho con su esposo, Oswaldo Márquez. Tenía aproximadamente, 20 años. 

maria emilia y ana cornejo. fuente: Paracaídas Soluciones Editoriales

Sus vecinos en Caja de Agua son personajes que conocemos: Susana Villarán (ex alcadesa de Lima), Manuel Piqueras, su esposo, Denis Sulmont y Rulfien Haac. Todos ellos se habían instalado ahí defendiendo una ideología social, tal como María Emilia también defendía. En este contexto social, político, artístico, MEC es una poeta relacionada con los poetas del movimiento Hora Zero y con justicia, al participar de los mismos eventos, frecuentar los mismos lugares, así como también por la intención de revolucionar el mundo con la poesía.

fuente: Paracaídas Soluciones Editoriales

Y fue la poesía la que la colocó en el mapa de nuestra historia de la literatura no solo como poeta sino como feminista. Bastaron tres poemas publicados en la revista "Eros" dirigida por Isaac Rupay para que MEC rompiera las ideas, las construcciones, sobre la "poesía femenina". Las rompiera y generara, con ello,  polémicas y debates que han transgredido siglos. 

Al respecto, la polémica más conocida es la que surgió en el año 2007, cuando José Rosas Ribeyro publicó un testimonio en el que afirmaba que los tres poemas emblemáticos de MEC habían pasado por un proceso de “construcción” y “montaje” a manos de él y Elqui Burgos, por lo que se atribuía parte de la autoría. 

uno de aquellos tres poemas de la polémica

En este contexto, el de minimizar la obra de esta poeta, el de cuestionar su prematuro rol feminista, es que este libro, esta investigación, es de gran importancia. Gracias a las fotos de dos de los tres poemas originales -escritos a mano- por Maria Emilia, podemos saber hasta qué punto fueron intervenidos. Entrevistamos a Pedro Casusol quien destinó 4 años a buscar todas las madejas y todos los hilos posibles para conocer mejor a nuestra poeta.

pedro casusol. fuente: revista cocktail

el inicio de La búsqueda

La etapa de investigación la realicé entre los años 2015 y 2016. En ese periodo de tiempo hice las entrevistas y buceé en documentos, tanto en la Biblioteca Nacional como en páginas web. Tuve la suerte de que, en una de mis primeras entrevistas en el Centro Flora Tristán, me facilitaron textos como el de Esther Castañeda, que fue probablemente el primer acercamiento que tuve a una descripción física y personal de María Emilia. Fue para mí un descubrimiento sumamente valioso. 


Las fotografías y el cuaderno de maría emilia

Sobre las fotos de archivo: no hay fotos de María Emilia de la época en la que escribió sus poemas emblemáticos. La única que obtuve me la envió Alberto Rutté, quien vivió con ella y Coco Márquez en la casa en Caja de Agua. La otra foto de esa época la publicó Jesús Cabel en el libro Fiesta perpetua en 1990. 

recital en san marcos. fuente: archivo de jesus cabel

Sobre el llamado “cuaderno de francés”, supimos por primera vez de él en 2015, cuando iniciaba mi investigación. Fue Diego Lazarte quien, a raíz de un mini documental que sacó sobre Cornejo, reveló la existencia del cuaderno que había sido guardado por más de 40 años por Charo Arroyo. Con motivo de esto se realizó un homenaje en la Casa de la Literatura, donde se hizo entrega del cuaderno a la familia. 

Ya desde ese momento supe que contenía los manuscritos de “Tímida y avergonzada” y “Como tú lo estableciste”, pero no pude acceder a él hasta inicios de febrero de este año

poema descrito a puño y letra por la autora.
foto de  pedro casusol

Pasé un fin de semana entero con el cuaderno de María Emilia, una de las experiencias literarias más alucinantes que he tenido, transcribiendo y estudiando sus poemas manuscritos. Se trata de un documento muy valioso, así se lo hice saber a la familia, ya que en él encontramos no solo los 19 poemas inéditos que incluimos en el libro, sino también muchos de los poemas que fueron publicados en 1989.
los rastros de la intuición
Creo que toda investigación comienza por lo intuitivo. Al inicio yo solo tenía preguntas y fui siguiendo la madeja, guiado por la información que los amigos de María Emilia me brindaban. 

fuente: Paracaídas Soluciones Editoriales

Estaba obsesionado, y creo que era un error, por la biografía de la poeta. Fue tras una entrevista realizada el año 2016, una de las últimas que hice, al poeta Hildebrando Pérez, quien me hizo ver que debía dejar que los poemas hablaran por sí mismos. 

Yo tenía ante mí el mejor testimonio: el de María Emilia, a través de sus poemas. Eso hizo replantearme todo mi trabajo. Hizo también que paralizara el proyecto durante unos años. No me sentía preparado para analizar la poesía de María Emilia Cornejo. Hice entonces una Maestría en la Universidad San Marcos, la misma donde estudió ella, y me di cuenta que la mejor manera de hablar de Cornejo era dejar que sus poemas hablaran.

coco márquez
Conocer a Coco Márquez -a través de Rodrigo Nuñez Carvallo- fue un acto fortuito y muy corto. En el ensayo creo que funciona como un colofón. Pero el episodio fue eso y nada más. Al respecto, un año después, una amiga suya se contactó conmigo porque, a causa de mi irrupción en su casa, él había decidido hablar con ella sobre su relación con María Emilia. Sus declaraciones llegaron entonces a mí como un mensaje de ultratumba. Pero eran cosas muy íntimas, prefiero no entrar en detalles. 
más allá del erotismo
Si bien María Emilia se hizo conocida como autora de una poesía femenina ligada a lo erótico, durante su vida ella se consideró a sí misma una poeta preocupada por lo social. El cuestionario que ella resolvió a su ingreso al Taller de Poesía de la Universidad San Marcos nos ofrece alcances sobre su concepción de lo poético, pero tengo la impresión de que esto cambia hacia 1972, cuando ella escribe sus poemas emblemáticos. En todo caso, podemos decir que María Emilia siempre escribió una poesía combativa, tanto en lo íntimo como en lo social.
la psicóloga a la que visitaba maría emilia
Sería imposible dar una explicación cabal sobre un acto tan íntimo y definitivo como el suicidio. No obstante, llegué al extremo de contactarme con la psicóloga que había tratado a María Emilia antes de su muerte. Lógicamente, ella me dijo que no podía dar entrevistas sobre pacientes, por el secreto profesional. En lugar de eso, me dio información sobre la depresión clínica, que era lo que María Emilia sufría. Conversamos brevemente sobre la posibilidad de que el aborto haya sido un desencadenante. La doctora me dijo que no existen investigaciones que vinculen el aborto y la depresión, aunque las mujeres que se someten al aborto suelen deprimirse por un tiempo, no se sabe a ciencia cierta las causas.
matrimonio y maternidad
Creo que el matrimonio y la maternidad eran puntos importantes en la agenda de vida de la autora. Aunque una amiga de la universidad, Gladys Acosta, no veía a María Emilia interesada en esos temas, Susana Villarán, quien fuera muy cercana durante la etapa en Caja de Agua, sí reconoce que la maternidad era un asunto fundamental en su amiga. La hermana, Ana María, también lo considera. Creo que si vemos su historia con cierta distancia, vemos que sus planes incluían este ideal. Tal vez lo que ocurrió con María Emilia fue que el descubrimiento de los poetas de su generación, en particular su relación con los Hora Zero, la llevó a vivir en una suerte de dualidad que la condujo a la autodestrucción.
la hermana gemela

Ana María ha sido fundamental para sacar el proyecto adelante. No solo ha sido mi fuente principal de información, sino que nos ha apoyado dándonos toda la libertad para armar el libro según los criterios que hemos utilizado. 

ana cornejo. foto de lima en escena - rosana lópez cubas

Es gracias a la familia que hemos podido publicar los objetos personales que parecen en el portafolio, incluyendo el “cuaderno de francés”. Sin este apoyo, nada habría sido posible.

La poeta (izquierda) con su madre, Aída Márquez, y su hermana gemela, Ana María. [Leyenda de La República]


tus poemas favoritos, pedro.

Me gustan varios: “Soy la muchacha mala de la historia”, que sin duda es el one hit wonder de Cornejo, y “Tímida y avergonzada”, por mencionar solo dos. 

Pero mi favorito creo que es: “empezar otra vez./ citarnos en algún lugar que no sea el Versalles…”, en especial cuando dice: “las calles de Lima nos aguardan para gritarnos a la cara/ nuestro desamparo”, porque me parece que es una descripción muy simple y aguda de nuestra ciudad. Se trata de un poema que tiene dos versiones y que Susana Reisz utiliza para formular su “teoría de los bloques de Lego”. Y también el poema que dice: “debí seguir tus consejos,/ no leer más a Kafka/ ni frecuentar esos cafés/ que tú sí frecuentas;/ pero es tarde/ hace frío/ y estoy sola”.