El Perú ocupa el último lugar en comprensión de lectura, matemática y ciencias, de un grupo de países de América Latina, según ha revelado un informe del Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes, más conocido como Pisa. Al respecto, el secretario general del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep), Hammer Villena, consideró que "hay una ausencia de gobernabilidad educativa en los último 20 años". 

Es sabido, además, que se debería incrementar el presupuesto en el sector Educación, ya que en el Perú la inversión por alumno es de 476 dólares, mientras que en Chile, que es el mejor situado en el informe Pisa, invierte 1.414 dólares. Para darnos una idea más general, Colombia destina 1.293 dólares y Brasil 1.321. En todos estos casos, estos países también superan al Perú en el ranking. Villena declaró a RPP que el actual Proyecto Educativo Nacional está "descontextualizado" y no garantiza la calidad educativa. 

Ante esta problemática bien conocida y de profunda gravedad, surge una lúcida y esperanzadora propuesta del conocido actor Sergio Galliani. Una propuesta que si bien no espera solucionar todas las falencias de la educación, si espera, por lo menos, propiciar una forma alternativa de pensarla y de afrontarla. Una a la que podríamos llamarla, lúdica y por qué no, divertida.

“Buscadores de libros” es el nombre de un grupo cerrado de Facebook en el que cualquiera puede participar. Actualmente somos –porque yo también participo– 31,515 miembros que conformamos una comunidad de lectores que nos prestamos libros de forma anónima. La mecánica es simple: se deja un libro en un parque y se avisa en el Facebook del grupo dando las coordenadas. Algún miembro que viva cerca, va, lo busca, y reporta que lo ha encontrado en la misma página. Luego, lo devuelve siguiendo la misma mecánica. Y claro, comparte otro libro. Ganamos todos: los que prestamos, los que encontramos, los que jugamos.

El nacimiento de la idea

Hace unos 7 meses salí a correr muy temprano y comencé a ver a mucha gente en los parques, en el malecón, con sus celulares. Estaban buscando algo y me quedé pensando en ese asunto de que la gente salía a buscar algo. Después me enteré de que salían a buscar Pokemones y me quedé pensando en que si la gente salía a buscar Pokemones, que son, finalmente, realidades virtuales, me puse a investigar en internet para ver cómo se podría aprovechar esa situación. Investigando, se me ocurrió la idea de reemplazar a los Pokemones por libros, y reemplazar así, la búsqueda de realidades virtuales por algo más concreto y finalmente, más productivo, como los libros. Entonces hice la página en Facebook, le puse juego, e intriga, y así empezó todo.

¿Por qué tenemos tan pocos lectores en el país?

Poco a poco me di cuenta que la gente no leía más por un tema de acceso a los libros, que, como sabemos, son caros. Nuestra propuesta, porque somos cinco personas trabajando en esto, tiene que ver con acercar los libros a las personas de una forma lúdica y divertida. Y por supuesto, de forma gratuita.

La necesidad de leer

Yo tengo una escuela de actuación y los chicos cada vez llegan con menos información. Tenemos que darles en un año y medio todo lo que no les han dado en los once años del colegio. Entonces, creo que si a una persona desde pequeña no le enseñas el hábito de la lectura de grande va a ser mucho más difícil.

De otro lado, si los padres no tienen el hábito, y los chicos tienen no el ejemplo en sus casas de la lectura, no van a tener modelos que imitar. En ese sentido, la gente muchas veces prefiere invertir su dinero en comer algo, en tomar una chela o en darse algún gusto, de tal modo que solo invierten en libros los que tienen estudios o están en alguna especialidad. Esto restringe el mercado de los libros.

Somos más

Pero no solo se dejan libros en los parques, como se puede ver en la página del Facebook, se dejan kindles y eso nos abre a otro mercado: los lectores que leen en tablets y no solo en libros. Nuestra aplicación también nos permite crecer, y más adelante vamos a buscar ampliar más aún nuestros lectores. Por ejemplo, esperamos tener una aplicación que dé los datos por audio y esperamos esconder los libros que estén en braille. Si conseguimos esto, la apertura y la inclusión seria para todos, y ese es nuestro objetivo principal, que todos tengan acceso a la información.

La clave del éxito está en jugar

Los buscadores de libros son exitosos porque si te das cuenta, estás jugando un juego, que además, es un juego en el que todos podemos participar porque es uno de escondite, es divertido e inclusivo. Además, recalco, es gratuito. Solo se esconden libros en los parques que son gratuitos, así, por ejemplo, nadie iría a esconderlo en el Parque del agua, donde te cobran la entrada. Finalmente, este juego te da la posibilidad de ser reconocido a través de nuestra página. Muchas personas que están en redes de pronto opina sobre tal o cual libro y se comienza a hacer conocida. Este autorreconocimiento y el hecho de que los demás lo reconozcan también puede opacar el beneficio de la lectura que en una primera etapa puede pasar desapercibido pero poco a poco se va notando que lo que va a quedar es el beneficio principal, que es el del libro que se ha leído.

Los buscadores ayudan a los damnificados

Los buscadores de libros se está convirtiendo en un grupo de mucha fuerza porque hemos llegado a casi 17 toneladas de ayuda para muchos lugares de ayuda. Yo no tengo bandera política ni religiosa y soy totalmente independiente y creo que eso la gente lo veo y la receptividad también ayuda, y que esto no es por ningún fin de propaganda de ningún tipo es un fin altruista totalmente. Y creo que la gente lo valora.

Nuestros aliados y los beneficios que ofreceremos a los buscadores

Ibero nos da libros para esconder y, reconocemos también que la ayuda viene de muchos lados en el tema de libros. Ahora estamos conversando con empresas del rubro para que nos ayuden a auspiciar nuestras aplicaciones pero que aparte nos van a dar beneficios para los buscadores: descuentos para los buscadores para ir al teatro, descuentos en librerías, descuentos en talleres de escrituras, descuentos con cafés, es decir, cafeterías que por presentar la aplicación te den vales para que te puedas tomar un café gratis. Cuando uno lee los beneficios se ven a posteriori pero estos beneficios ayudan a que mientras, se vea y se sienta algo tangible.